25/10/2025
La mala interpretación de Pilates: el peligro de perder el método
El mundo del fitness no es ajeno a las tendencias, pero ¿qué pasa cuando la esencia de un método se diluye en la búsqueda de la modernización? Recientemente, me encontré con una declaración de la mayor organización educativa de los EE. UU. hablando de Pilates Reformers: "Se han ido los días de rutinas rígidas y repetitivas; el Pilates de hoy es dinámico, atractivo y seriamente duro. ”
A primera vista, suena emocionante, incluso progresivo. Pero bajo la superficie, esta declaración revela un profundo malentendido de lo que es Pilates y por qué ha perdurado durante casi un siglo.
La repetición es la clave para el cambio
Pilates, en su esencia, es acerca de disciplina, estructura y precisión. Las llamadas "rutinas rígidas y repetitivas" no son un remanente obsoleto del pasado—son la base misma de lo que hace que Pilates sea eficaz. La repetición permite al cuerpo aprender, adaptarse y cambiar. Sin él, el movimiento carece de progresión, y la verdadera transformación se pierde.
El mismo error sucedió con el entrenamiento de paso. Step aeróbics se hizo popular debido a su naturaleza estructurada y repetitiva, que acondicionó efectivamente el cuerpo. Sin embargo, con el tiempo, las tendencias de fitness tomaron el control, convirtiendo las clases de step en rutinas de baile de alta energía donde el paso se convirtió en un mero accesorio en lugar de la herramienta ¿El resultado? La efectividad de la formación por escalones se diluyó hasta el punto en que quedó irreconocible.
Ahora, lo mismo le está pasando a Pilates.
El riesgo de perder el método
Cuando Pilates es despojado de su estructura disciplinada en favor de movimientos de alta intensidad, rápidos o constantemente variados, deja de ser Pilates. La longevidad del método no se debe a su capacidad de entretener, sino a su capacidad de soportar y transformar el cuerpo. Los mismos principios que lo hacen funcionar (control, respiración, centración, precisión, flujo y concentración) se socavan cuando damos prioridad a hacerlo "seriamente difícil" sobre hacerlo funcionalmente beneficioso.
La creatividad en la enseñanza es esencial, y cualquiera que me conoce sabe que acepto la innovación. Pero la verdadera creatividad en Pilates no significa abandonar la disciplina fundacional del método. Significa trabajar dentro de su marco para perfeccionar el movimiento, profundizar el entendimiento y mejorar los resultados. Sin esa estructura, Pilates pierde su propósito y, en última instancia, su efectividad.
Un llamado para proteger el método
Pilates no necesita ser "rebautizado" para seguir siendo relevante. La razón por la que ha durado durante décadas es porque funciona. Aquellos de nosotros que hemos dedicado nuestras vidas a este método tenemos la responsabilidad de asegurar que sus principios básicos se respeten, en lugar de suavizarse para adaptarse a la última tendencia de fitness.
Las tendencias vienen y van, pero la disciplina, la constancia y la estructura siempre serán la columna vertebral de cualquier método de entrenamiento efectivo. Pilates no se trata de ser el entrenamiento más duro en la habitación; se trata de ser la más inteligente y transformadora. No permitamos que la industria olvide eso.
Del muro de Michel King (Pilates Master)