15/10/2025
¡Las últimas semanas se sienten muy difíciles!
Muchos pudieron experimentarlo como un corte de circuito interno: momentos en los que la mente se apaga, las palabras no fluyen o se olvidan, el cuerpo físico se siente pesado o aparecen mareos y dolores de cabeza.
Algunos incluso atravesaron breves pérdidas de conciencia o una sensación de desconexión total de la materia.
Con cada nuevo latido del corazón de la Tierra, vivimos y seguimos viviendo procesos profundos: una actualización de la malla cristalina del planeta, acompañada por un reseteo del Alma humana.
La intensidad de este reseteo puede asustar, porque no estamos acostumbrados a cambios tan fuertes y profundos.
¡Pero no hay motivo para temer!
Muchas Almas lo esperaron durante miles de años, ¡y ahora está sucediendo!
Estamos atravesando un proceso absolutamente natural de reconfiguración energética planetaria y, por ende, colectiva.
El sistema planetario atraviesa un rediseño profundo, desconectándonos de las redes antiguas e ineficientes, de los programas destructivos y limitantes, y de los egregores y creencias obsoletas que ya no pueden acompañarnos hacia la Nueva Tierra.
Este proceso puede sentirse caótico, como si algo dentro de nosotros muriera, explotara o dejara de funcionar.
Y en realidad, eso es exactamente lo que sucede:
lo viejo se disuelve para dar espacio a lo auténtico, a lo nuevo, a lo luminoso.
Podemos rediseñar nuestro Ser, nuestro camino, nuestra realidad, nuestro futuro, nuestra vida.
La clave está en no resistir ni huir, sino en entregarnos a esta transformación interna y descansar tanto como sea posible para que fluya.
Al permitir que el proceso fluya, la energía puede reorganizarse de forma natural, fácil y armoniosa.
Y lo mejor que podemos hacer es dejar que suceda todo lo que debe suceder.
Todos estamos entrando en la etapa del Rediseño, un momento sagrado en el que comenzamos a crear la mejor versión de nosotros mismos, para empezar a co-crear desde la consciencia y responsabilidad, libres de las interferencias del pasado, a partir del año 2027.
¡Permítanse morir a lo que ya no son, para renacer en las vibraciones más elevadas que el planeta sostiene ahora!
El corazón de la Tierra late al ritmo del Amor.
Escuchémoslo… y dejemos que nuestros corazones vibren al unísono con la Nueva Tierra.
Si su Alma siente el llamado, escriban en los comentarios:
“Abro mi corazón y activo el reseteo en mi Alma y en la Tierra.”
Así anclamos juntos esta frecuencia de Amor y transformación en el ahora.