29/04/2025
Hace algunos años, en el Centro de Desarrollo Comunitario de Servita, comenzó a formarse algo más que un grupo de práctica de Ashtanga Yoga. Poco a poco, fuimos construyendo una comunidad: un espacio donde no solo nos encontramos para mover el cuerpo, sino para compartir la vida, conocernos, cuidarnos y crecer juntos.
Este día , con ese mismo espíritu, vivimos una experiencia maravillosa: la Ruta de la Panela.
Fue un día para conectar con nuestras raíces, con la tierra, con la historia y con el placer de vivir. Comenzamos con un delicioso desayuno campesino, seguido de un taller sobre la gratitud, que nos permitió reconocer lo valioso de cada paso, de cada encuentro, de cada momento.
Aprendimos a hacer Melkocha, conocimos el proceso de producción de la panela en Villeta, degustamos jugo de caña con limón Tahití, y compartimos un almuerzo típico lleno de sabor y tradición.
Pero no fue solo lo que hicimos, sino cómo lo vivimos: con alegría, con curiosidad, con cariño. Al final del día, entre yoga, piscina y risas, nos dimos cuenta de algo: no es solo una práctica lo que compartimos, es una manera de ver la vida, de agradecerla, de celebrarla.
Me siento profundamente honrado y agradecido con cada persona que hizo parte de esta experiencia. Gracias por ser parte de esta comunidad hermosa, que crece desde el corazón.
Seguimos caminando juntos, con gratitud, alegría y sentido.