12/08/2025
Me duele ver cómo seguimos criando generaciones de niñas con miedo a su cuerpo. No porque lo decidan sus madres, sino porque a muchas de nosotras tampoco nos lo enseñaron.
Tu hija no necesita miedo, necesita información. Necesita saber cómo se ve y cómo se siente un cuerpo que cambia, que crece, que sangra. Que a veces duele, que a veces confunde. Pero sobre todo, necesita saber que ese cuerpo es suyo. Que nadie tiene derecho a decidir sobre él más que ella.
Necesita saber que la menstruación no es sucia ni algo que deba esconder. Que los coágulos, los cólicos o los retrasos no son castigos ni vergüenzas, sino señales que su cuerpo le da para conocerse mejor. Necesita palabras correctas, no apodos. Necesita tener permiso para hacer preguntas sin sentir culpa.
También necesita saber que la sexualidad no comienza cuando hay otra persona, sino desde que empieza a habitar su cuerpo con conciencia. Que su placer, sus límites, su autonomía y su dignidad son temas que se hablan desde el amor y el respeto, no desde el silencio.
Hablemos con nuestras hijas. No esperemos a que tengan dudas, ni a que algo "pase". La salud se construye con información, con confianza y con tiempo. Y tú estás a tiempo de ser su lugar seguro.