08/10/2025
En tus manos me encontraste en silencio, como joya escondida en el desierto, me guardaste en la calma de tu cielo, me llamaste y en tu luz hallé consuelo; tu mirada me sostiene, me levanta, soy reflejo de tu amor en tu esperanza.
Gracias Dios porque en tu favor, misericordia y bondad me has regalado otro año más de vida, solo pido que me guardes Señor en tu mirada como la niña de tus ojos amada. Escóndeme bajo tus alas de abrigo porque Soy Tuya, SOY TUYA y contigo respiro.
𝓔𝓷𝓼ℯ́𝓃̃𝓪𝓷𝓸𝓼 𝓭𝓮 𝓽𝓪𝓵 𝓶𝓸𝓭𝓸 𝓪 𝓬𝓸𝓷𝓽𝓪𝓻 𝓷𝓾𝓮𝓼𝓽𝓻𝓸𝓼 𝓭𝒾́𝓪𝓼, 𝓺𝓾𝓮 𝓽𝓻𝓪𝓲𝓰𝓪𝓶𝓸𝓼 𝓪𝓵 𝓬𝓸𝓻𝓪𝔃ℴ́𝓷 𝓼𝓪𝓫𝓲𝓭𝓾𝓻𝒾́𝓪.
𝓢𝓪𝓵𝓶𝓸𝓼 90:12