23/10/2025
RECORDANDO LAS MANOS DETRÁS DE LAS COSAS
Las comodidades del mundo moderno son increíbles, realmente. Podemos tocar una pantalla y tener casi cualquier cosa entregada a nuestra puerta, a veces en cuestión de horas.
Pero a veces siento una especie de vacío en esto, un grito tranquilo del alma. Rara vez vemos, escuchamos o interactuamos verdaderamente con las personas que hacen, diseñan, empaquetan o hacen crecer las cosas que usamos.
Nuestros sistemas nerviosos nunca fueron construidos para un mundo sin rostro. Creo que todos anhelamos un sentido de conexión, no sólo a una "marca", sino a las muchas manos detrás de ella. Los cultivadores, los diseñadores, los empacadores, los creadores. La gente. Sus corazones. Sus esperanzas y sueños.
Antes de hacer clic en "comprar" o sacar algo de un estante, podemos hacer una pausa por un momento, tomar un respiro y *recordar* el esfuerzo y el cuidado detrás de lo que estamos recibiendo.
Incluso podríamos elegir una tienda local independiente, un pequeño negocio o un artesano, alguien cuyo nombre conozcamos.
Hay algo tranquilizador y profundamente descansado en eso. Una sonrisa. Un gesto humano. Un instante compartido de ligereza. Un momento de gratitud.
La sensación de que este intercambio, por pequeño que sea, importa.
El progreso seguirá moviéndose y moviéndose, por supuesto. Pero tal vez podamos movernos con él un poco más conscientemente, recordando a los humanos detrás de los sistemas, su trabajo duro, su dolor, sus pasiones... y al hacerlo, mantendremos nuestros propios sistemas nerviosos un poco más conectados, tranquilos... y vivo.
- Jeff Foster