25/06/2015
EL MÉTODO ROLFING
Esta terapia establece varias pautas de reeducación postural a fin de recuperar la conciencia de nuestro propio cuerpo. De esta forma se recupera o adquiere la llamada “inteligencia corporal” que nos mantiene alerta en cada situación cotidiana susceptible de provocarnos dolor o malestar: una postura incorrecta, una forma de andar o apoyarse…
Nos ayuda a tomar conciencia del cuerpo, a liberar tensiones y a descubrir una manera más armoniosa de estar y moverse. Durante las sesiones se trabajan temas como la respiración, la forma de apoyarnos, los brazos o los sentidos. El Rolfing permite al individuo una mayor autoconciencia, un conocimiento de sí y de las fuerzas que actúan sobre nuestro organismo.
Los beneficios del Rolfing se pueden apreciar tras las primeras sesiones, es posible percibir como la respiración se libera, la tensión en el pecho disminuye, los músculos adaptan su tensión de una forma más natural a los requerimientos gravitatorios, la distensión corporal, la relajación y el contacto pleno de los pies y piernas con la Tierra permiten integrar el movimiento como una función consciente y enriquecedora de la experiencia humana.
Es una técnica de integración postural desarrollado a principios del siglo pasado por Ida Rolf, Mezcla técnicas de masaje profundo y manipulativo, en cierta forma no procura reemplazar nada ni forzar nada, simplemente procura restituir el organismo a su condición o postura normal frente a la acción de la gravedad. Es por ello que no podemos describirlo como un simple método de masaje, ni como otro medio más de educación postural, ya que va mucho más allá..
El cuerpo responde al medio, que le demanda cada vez más esfuerzo, con tensión, esa tensión puede ser válida cuando cubre la función de defensa, sin embargo cuando se establece como una reacción inconsciente frente a toda experiencia sensorial que nos alcanza desde el exterior, se transforma en un problema que no hará sino crecer conforme las nuevas tensiones se acumulan sobre las precedentes y el cuerpo no alcanza a recobrarse, a relajarse ante semejante marea de tensión inquebrantable.
La tensión se convierte en dolor y el dolor se cronifica, alcanza el inconsciente y una armadura de dolor y tensión que se establece para resguardarnos nos destruye lentamente. La rigidez de la armadura dificulta el movimiento, un cuerpo sometido, rígido, ve limitada su fluidez, una limitación que alcanzará a estados mentales y emocionales sin duda.
La rigidez de una parte acaba alcanzando a la totalidad del ser.
La acción de la gravedad se tiene muy en cuenta en el Rolfing, Estamos sometidos a la gravedad desde que nacemos y en todo este período de vida, no ha pasado ni un solo instante sin que nos afecte. Nuestra estructura se ve afectada por esta fuerza que está presente en todo, como también se ven afectados nuestro sistema de sostén (miofascial), la predisposición de nuestros órganos internos, la circulación sanguínea y linfática, etc.
En definitiva, el Método Rolfing s una técnica de manipulación profunda del tejido conectivo que busca alinear el cuerpo con la gravedad, meejorando la postura y el aspecto físico, aliviando tensiones y dolores, aumentando la flexibilidad y el bienestar personal.