27/10/2025
La evolución de cómo enseñamos y transmitimos el Yoga es constante.
Cuando terminas el instructorado repetís lo que te enseñaron o tomas como propias cosas de otros profes. Pero si seguís estudiando, leyendo, poco a poco vas encontrando tu forma, tú pedagogía, tu sello propio.
Estás son cosas que ya no hago (o nunca hice mucho)
1. Nunca me gustó decir Namaste al finalizar la práctica. No lo sentía natural. Siempre leí que significaba que "la luz en mi bla bla tu luz sarasa", pero luego me enteré que en realidad Namaste es un saludo normal en la India y más sentido me hizo no repetirlo como un loro en las clases.
En vez de eso, hago una pequeña reverencia y les agradezco por haber compartido la práctica.
2. Tener una clase super armada, un cuaderno con la secuencia, etc...
Lo he hecho, las primeras veces... pero la realidad es que al ser clases de Hatha Yoga, no hago secuencias super largas y complicadas.
Y la otra realidad es que a veces llegan personas a las clases que por h o por b no pueden hacer tanto ni seguir tantos cambios.
Así que siempre se lo que quiero trabajar, tengo secuencias cortas que quizás puedo ir encadenando y progresando a medida que veo que los asistentes pueden hacer...
3. Dar muchas indicaciones para las posturas. Si bien solía hacerlo al principio, prefiero dar indicaciones externas de acciones que tanta descripción anatómica o detallista, a veces menos es más.
4. Ocupar espacios de silencio. Al principio me incomodaban un poco los momentos de silencio y creía que había que llenarlos un poco pero me fui dando cuenta que esos silencios son fundamentales para observar la respiración, la mente. Las sensaciones en el cuerpo...
5. Hablar demasiado en Savasana. Creo que no hay nada peor que te estén hablando todo el tiempo y no hayan esos espacios de silencio que decía antes. Suelo guiar o hacer meditaciones y luego dejarlos fundirse con el silencio y la quietud. Fundamental para el descanso y la regeneración.
Profes, que opinan? Alumnos? Que opinan? Los leo 👀