10/10/2025
Llevar comida a los familiares de personas internadas en el Hospital Civil Viejo es mucho más que un acto solidario: es tender una mano en medio del dolor, el cansancio y la espera.
Muchos de ellos pasan días enteros fuera de una sala, sin recursos, con la preocupación a flor de piel y el estómago vacío. Un plato caliente, un lonche, un vaso de café no solo alimentan el cuerpo, también reconfortan el alma.
Es una forma silenciosa de decir: “No estás solo”. Porque en esos pequeños gestos vive la verdadera humanidad. No cambiamos la situación médica, pero sí transformamos un momento de angustia en uno de alivio, cariño y dignidad.
Ser voluntario así es sembrar esperanza donde más se necesita. Y en cada entrega, también nosotros aprendemos a valorar, agradecer y servir desde el corazón.
Se parte de esta gran familia de ayuda y esperanza.
Apóyanos en nuestra próxima visita 🌹
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