24/01/2018
HABITO DE LENGUA.
La lengua, en condiciones normales, a la hora de tragar, se coloca tocando ligeramente la parte delantera del paladar. En cambio, cuando hay un hábito de interposición lingual, la lengua se encuentra descansando entre los dientes de forma inconsciente y en el acto de tragar aparece entre los dientes superiores e inferiores.
Este hábito de interposición lingual es una práctica adquirida con la lengua por repetición frecuente de un mismo acto, que en un principio es consciente y posteriormente inconsciente, siendo como resultado un hábito nocivo para el desarrollo de los molares y para la correcta posición de los dientes.
Es importante detectar esto a tiempo para poder reeducar la lengua en su correcta posición. no solo observamos la posición de los dientes, si no se corrige puede provocar una alteración en el desarrollo y causar una deformación, como podría ser una mordida abierta (falta de contacto entre los dientes superiores e inferiores), entre otras.
Normalmente, suele aparecer en edades muy tempranas, siendo recomendable visitar a un ortodoncista lo antes posible para descartar su aparición.