10/01/2019
¿Qué cantidad podemos cenar?
La cantidad variará depende la persona y su ritmo de vida, pero lo importante sería conseguir un buen nivel de saciedad sin comer más de lo debido.
Una pieza fundamental a la hora de regular nuestro nivel de saciedad sería el hecho de masticar adecuadamente los alimentos.Ya que es en la boca donde comienzan los procesos de digestión resulta esencial para prevenir problemas como el estreñimiento masticar la comida repetidas veces antes de tragarla.
Además, comer más despacio ayuda a nuestro cerebro a ser consciente de cuánto hemos ingerido y regular así las hormonas que controlan nuestros niveles de hambre y saciedad (grelina y leptina).Si logramos controlar cómo comemos podremos ayudar a nuestro cuerpo a equilibrarse e indicarnos cuándo deberíamos dejar de comer.
Otros factores como el estrés o los problemas emocionales pueden favorecer que comamos más y nos dificultan poder adelgazar. Controlar estos factores depende de cada persona y sus circunstancias, pero si estás decidida/o a adelgazar es importante que tengas en cuenta qué factores pueden hacer que aumente tu ingesta de calorías.
Adelgazar escogiendo alimentos saciantes
Lo recomendable para una cena saludable son los alimentos fáciles de digerir tales como los que son ricos en proteína vegetal o la fruta fuentes de azúcares simples, evitando siempre que podamos el consumo de fritos, grasas saturadas o azúcares complejos que pueden dificultarnos poder adelgazar.
Si escogemos alimentos ricos en fibra que sean asimilados por el cuerpo lentamente como las verduras, las frutas y hortalizas o los cereales, estaremos ofreciendo un aporte de energía equilibrado a nuestro cuerpo. Un consumo equilibrado y saludable resulta fundamental a la hora de adelgazar.
¿Y los que tienen mucha hambre?
El ritmo del día a día a veces nos dificulta ceñirnos a nuestros objetivos para adelgazar de forma saludable, las prisas y los horarios pueden hacer que nuestro cuerpo sufra altibajos y nuestra sensación de hambre aumente. Esto puede llevarnos a consumir alimentos rápidos y calóricos.
En este caso se nos aconseja incluir una merienda a media tarde y adelantar lo posible el horario de las cenas con el fin de que nuestro cuerpo vaya gastando progresivamente las calorías que comemos sin que tengamos una sensación intensa de hambre al llegar la cena.
Eso sí, la merienda tiene que ser también saludable. Ponemos algunos ejemplos:
Fruta o jugo natural
Frutos secos: nueces, avellanas, almendras, etc.
Frutas secas: dátiles, ciruelas pasas, orejones, etc.
Bastoncitos de pan integral
Queso fresco con membrillo
Bocadillo integral (que puede ser de queso, aguacate, huevo, etc.)