11/19/2025
La palabra “espiritualidad” también terminó convirtiéndose en un molde. ( nueva religión )
Nuevo prision mental .
Una etiqueta cargada de expectativas:
cómo debes hablar,
cómo debes comportarte,
cómo debes sentir,
cómo debes vivir,
qué está “permitido”,
qué está “prohibido”,
cómo “deberías” escribir,
qué tipo de ropa supuestamente debes llevar,
qué es correcto, qué no lo es…
y un sinfín de reglas que solo te ponen dentro de un molde.
Y te lo digo desde la verdad más sincera:
Eso no te acerca a ti.
Eso te aleja.
Porque la espiritualidad —cuando se vuelve una idea social—
crea otro personaje más:
el “ser espiritual”,
el “elevado”,
el “puro”,
el “consciente”,
el “zen”.
Una máscara.
Un personaje más.
Otro papel que interpretar.
Y la conciencia no quiere nada de eso.
La conciencia no te pide que seas espiritual.
Te pide que seas honesto.
Honesto contigo mismo.
Honesto con los demás.
Nada más.
No te pide que medites seis horas.
No te pide que vivas como un monje.
No te pide que renuncies al mundo.
No te pide perfección.
No te pide pureza.
No te pide que entiendas todo.
Solo te pide esto:
Sé tú.
Sé verdadero.
Sé coherente.
Sé honesto.
Y algo importante, que quiero dejar claro aquí en mi página:
Yo no uso estos términos para crear otra doctrina ni para inventar otra etiqueta.
Aquí no vas a encontrar dogmas, recetas, ni creencias obligatorias.
Lo que comparto aquí nace de vivencias reales,
no de conceptos prestados,
no de frases copiadas,
no de lo que “alguien dijo que hay que hacer”.
Aquí se trata de experiencia.
De sentir.
De ver.
De vivir.
De reconocer tu propia verdad y tu propia voz.
La palabra “espiritualidad” te empuja hacia un ideal.
La conciencia te devuelve hacia ti 🙏
Tomado de la red