05/08/2025
A veces surjan resistencias en el proceso terapéutico. Puede que haya temas que te resulten dolorosos o incómodos de abordar, sesiones a las que no quieras asistir porque te sientes vulnerable, o conversaciones que prefieras evitar porque te confrontan con aspectos de ti mismo que no te gustan. También es posible que sientas que la terapia no está dando los resultados que esperabas.
Es crucial que puedas comunicar estas inquietudes a tu psicólogo. Expresar tus dudas, miedos y frustraciones no es un signo de debilidad, sino un paso valiente hacia una terapia más efectiva. Tu psicólogo está capacitado para comprender estas resistencias y trabajar contigo para superarlas.
tu psicólogo está ahí para apoyarte, no para juzgarte. Si te resulta difícil hablar de ciertos temas, puedes empezar por expresar tus sentimientos de incomodidad y trabajar desde ahí. Una comunicación abierta y honesta es la clave para aprovechar al máximo tu terapia y alcanzar tus metas de bienestar emocional.