17/11/2025
Cuando posponemos nuestra sanación…
A veces no cancelamos una sesión “por tiempo”,
ni la posponemos “por dinero”,
ni la olvidamos “porque sí”.
La verdad más profunda es que…
muchas veces postergamos nuestra sanación porque todavía no creemos que merecemos estar bien.
Porque da miedo mirarnos de frente.
Porque sanar implica dejar caer excusas, capas y viejas versiones.
Porque elegirnos incomoda.
Cuando posponemos una sesión, cuando no abonamos, cuando corrés la fecha una y otra vez…
no estás rechazando a la terapeuta.
Te estás postergando a vos.
Sanar no es un trámite.
Es un compromiso con tu alma.
Es decirte: “soy prioridad”, incluso cuando toda tu vida quiso enseñarte lo contrario.
Y también es válido reconocerlo:
A veces no estamos listas.
A veces el dolor pesa.
A veces la mente se defiende porque sabe que una sesión puede cambiar todo.
Pero llega un momento…
en que seguir huyendo duele más que sanar.
Un momento donde el corazón pide ayuda, pide luz, pide contención.
Y es ahí donde la vida te muestra que cuando dejás de posponer tu sanación, empezás a encontrarte con vos misma.
Elegirte no es egoísmo.
Elegirte es decirle sí a tu vida.
Y cuando estés lista…
acá estoy para acompañarte desde el amor, los registros, las constelaciones, la energía y la luz que te habita. 💛✨