17/09/2025
Aprender a decir “no” es uno de los pasos más difíciles, pero también uno de los más importantes para tu salud mental. Poner límites es una forma de proteger nuestro espacio y cuidar de nosotros.
Muchas veces sentimos culpa o miedo cuando decimos “no”, porque nos enseñaron a complacer o a priorizar a otros antes que a nosotros. Nos sentimos, o los otros nos pueden marcar, que estamos siendo egoístas. Pero respetarnos a nosotros mismos es clave para mantener relaciones saludables y sentirnos en paz.
Y ojo que poner límites no es cortar vínculos a la primera incomodidad. No es responder con agresión, frialdad o indiferencia. No es dejar de hablarle a alguien sin explicar nada. No es desentenderse del efecto que nuestras palabras o actos pueden tener en otros. No es decir “yo soy así” y cerrarse al diálogo.
Poner un límite es hacerse cargo de lo que a uno le pasa, sin descargarlo sobre los demás.Es poder decir “esto no me hace bien” sin herir. Es sostener una conversación difícil sin entrar en modo ataque o defensa.
Un límite no busca controlar al otro, sino cuidarnos a nosotros. Y también, en lo posible, cuidar el vínculo.
¿Qué te cuesta más a la hora de poner límites? Charlemos en comentarios 👇🏼
//
📍Si querés iniciar terapia con nosotras, podés consultar en el link que aparece en nuestra descripción. Esperamos tu consulta!