28/11/2025
Te cuento lo que se sabe —y lo que propone— Cristian Frers en relación a los humedales artificiales para el Río Areco, en la zona de Carmen de Areco (Buenos Aires, Argentina).
✅ Quién es Cristian Frers — y qué ha promovido
Cristian Frers es un técnico superior en Gestión Ambiental y comunicador social que hace años viene difundiendo la idea de usar humedales artificiales como una herramienta clave para el tratamiento de aguas residuales municipales, industriales y domésticas.
Desde al menos 2006 está impulsando proyectos en Carmen de Areco para prevenir la contaminación del Río Areco.
Su propuesta no es nueva: ya en 2009 publicó un artículo llamado “Buscándole una solución al Río Areco a través de la implementación de humedales artificiales”.
🌿 Qué son los humedales artificiales — y por qué los propone para el Río Areco
Los humedales artificiales son sistemas construidos para simular los procesos naturales de los humedales (zona de transición tierra-agua, con vegetación acuática). Su objetivo es servir como filtros naturales que depuren aguas contaminadas antes de que lleguen a cursos de agua como ríos, lagos o arroyos.
Se usan plantas acuáticas o semiacuáticas comunes en la zona (como totoras, juncos, camalotes, repollitos de agua —o similares) para favorecer la remoción de contaminantes.
Ventajas: relativamente bajos costos de instalación y mantenimiento, no requieren energía eléctrica (aprovechan procesos naturales), y pueden ofrecer una alternativa más amigable con el ambiente al tratamiento convencional de aguas.
⚠️ Problemas en el Río Areco — por qué Frers insistió tanto
Según Frers, desde hace años el Río Areco sufre contaminación por excesos de fósforo y nitrógeno —por detergentes, aguas servidas, residuos industriales/agropecuarios—. Este aporte favorece la eutrofización: crecimiento excesivo de algas en superficie que impide el paso de luz, mata las algas del fondo, agota el oxígeno del agua y termina provocando la muerte de peces y un desequilibrio ecológico.
Frers afirma que en 2005–2006 detectó signos de contaminación: espuma blanca en el agua, parámetros que hacían suponer problemas en calidad del agua, lo que lo llevó a pensar en soluciones alternativas.
Además, la contaminación no solo pone en riesgo el ecosistema acuático, sino también la salud humana y la calidad del recurso hídrico usado para consumo, riego o recreación.
🌱 Por qué los humedales artificiales beneficiarían al Río Areco — y por qué no se implementaron
Qué ganarían:
Un humedal artificial serviría de «barrera biológica» que filtraría contaminantes antes de que lleguen al río: reduciría fósforo, materia orgánica, sedimentos, coliformes, etc.
Ayudaría a prevenir procesos de eutrofización, preservando la vida acuática (peces, biodiversidad), y mantendría mejores condiciones del agua para uso humano, agrícola o recreativo.
Es una solución relativamente económica, con bajo costo de mantenimiento, sin necesidad de gran infraestructura ni consumo energético masivo —es decir, apropiada especialmente para municipios o zonas rurales/pequeñas como Carmen de Areco.
Además, aportaría beneficios ambientales secundarios: hábitat para fauna, mejor calidad del paisaje, estabilización del ciclo del agua, etc.
Por qué no se viene implementando (según Frers):
Aun cuando la propuesta lleva años, Frers denuncia que las gestiones municipales pasadas y presentes —en su texto menciona a ex-intendente Marcelo Alejandro Skansi (2007–2019) y a la actual gestión con Iván Villagrán (2019– )— no mostraron interés real, “miraron para otro lado” respecto al tema.
Aparentemente no hubo voluntad política, institucional o social suficiente para llevar adelante una transformación del sistema de gestión del agua en favor del río.
Según Frers, esto representa una oportunidad perdida: si se hubiera implementado, Carmen de Areco podría ser pionera en “aguas circulares” —es decir, reutilización sostenible del agua— desde hace más de una década.
📄 Contexto técnico: Qué dicen estudios sobre humedales artificiales
Para reforzar la viabilidad técnica del enfoque:
Estudios de humedales artificiales de flujo libre superficial con macrófitas acuáticas han demostrado que, con un diseño adecuado (tiempo de residencia hidráulico, cobertura vegetal, etc.), se logra una reducción significativa de materia orgánica, carga bacteriana y fósforo.
En algunos proyectos experimentales en Argentina, la remoción de carga orgánica puede rondar ~80 %, y de contaminantes microbiológicos cerca del 99 %, lo que evidencia el potencial real de estos sistemas en contextos rurales o semirrurales.
Además, los humedales artificiales pueden adaptarse a condiciones locales de clima, suelo y uso del agua, lo que los hace una alternativa viable para el contexto pampeano donde se encuentra el Río Areco.
🎯 Conclusión: Por qué la propuesta de Frers sigue vigente — y qué podría cambiar
La propuesta de Cristian Frers de usar humedales artificiales para sanear las aguas que desembocan en el Río Areco sigue siendo, hoy por hoy, una de las soluciones más razonables, sostenibles y eficientes — desde el punto de vista ecológico, económico y social — para mejorar la calidad del agua, preservar la fauna acuática y proteger a las comunidades.
El problema central parece no haber sido técnico, sino político: la falta de decisión municipal/institucional para implementarlo. Pero, dado el contexto ambiental creciente (contaminación, crisis hídrica, degradación de ecosistemas), volver a poner sobre la mesa esta propuesta podría tener gran sentido, especialmente en un río que atraviesa municipios con población dispersa, actividad rural e industrial ligera.
