18/08/2025
Osteoporosis significa “hueso poroso”. Es una enfermedad ósea que se produce cuando el cuerpo pierde demasiado hueso y produce muy poco. Como resultado, los huesos se debilitan y pueden fracturarse por una caída o, en casos graves, incluso por pequeños golpes.
El tratamiento osteopático actúa sobre el sistema neuro-músculoesquelético, basándose en la relación entre estructura y función para estimular el proceso de autorregulación inherente al cuerpo.
Mediante métodos de tratamiento dirigidos a mejorar la propiocepción y la postura, se pueden cambiar las condiciones que predisponen a las complicaciones de la enfermedad, como la disminución del equilibrio y el mayor riesgo de caídas debido a la hipercifosis y la reducción de la fuerza muscular.
Para mejorar la movilidad articular y mejorar las respuestas musculares en el curso de la osteoporosis, el enfoque terapéutico utiliza técnicas osteopáticas funcionales y técnicas de tejidos blandos diseñadas para aumentar la capacidad de aceptar cambios de longitud y tensión de manera más eficiente y mejorar así la capacidad de las estructuras para adaptarse a los movimientos con una disminución plausible del dolor y las limitaciones funcionales y una mayor autonomía (autosuficiencia e independencia).