🌿 Nutricionista Online
✨ Acompañando tu transformación desde la alimentación consciente
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✔️ Educación nutricional + acompañamiento diario real. A veces la rutina a la misma vida es la que nos conduce a alimentarnos de forma acelerada y sin prestar atención a la misma Varias actitudes intermedias determinan una predisposición trivial ante la alimentación. Nacemos con un cuerpo que va creciendo y desarrollándose a lo largo de los días, semanas, meses y años. Sólo tenemos uno, éste es irremplazable y la forma en que lo tratamos dice mucho sobre el enfoque de nuestra vida. La ilusión por mantenerlo sano y libre de enfermedades es algo hermoso porque permite que continuemos nuestra existencia con menos problemas de los que ya de por sí la vida puede acarrearnos. Pienso que el conocimiento sobre la forma de alimentarnos y nutrirnos es una disciplina que nos enriquece y no sólo culturalmente, sino también anímicamente y en salud. Tenemos que pensar en cómo comemos, si lo estamos haciendo adecuadamente, cómo se siente nuestro cuerpo y si queremos mejorar lo que no nos gusta de él, podemos ir cambiándolo poco a poco. La naturaleza humana es sabia, pero además es muy agradecida, cualquier intervención que hagamos sobre la misma, se nota rápido y si no lo vemos con nuestros ojos, sí lo nota nuestro organismo. Inclusive si tenemos predisposición genética, modificando el ambiente alimentario podemos aminorar e incluso evitar que nos pese en exceso. Masticar con calma, disfrutando de cada sabor y siendo conscientes del acto de comer, escoger los alimentos según el criterio del equilibrio alimentario, saber que estamos comiendo a lo largo de un día y perder un poco de tiempo en todo ello, es lo que nos da una mayor libertad sobre la salud y la enfermedad, no resultando una pérdida sino una ganancia que, a la larga, se transforma en vida. Nosotros escogemos y de nuestra elección dependerá nuestra existencia. Anabella Dal Lago
