19/10/2020
FLORES DE BACH, ANIMALES Y SUS RESPONSABLES
CHICORY (Achicoria)
Bach dijo sobre las personas Chicory:
“Para aquellas que piensan mucho en las necesidades de los demás, tienden a cuidar en exceso a los niños, a sus familiares, amigos y que siempre encuentran algo que enmendar. Están continuamente corrigiendo lo que les parece mal. Quieren estar cerca de las personas que les preocupan”
Maravillosa esencia. Es la flor de la energía femenina; del amor incondicional propio y ajeno; de la comprensión.
Así, en su estado negativo encontramos animales dependientes, posesivos, apegados y pegados a sus responsables o cual sea la figura con la que tienen vínculo (pj.: animales de protectoras apegados a uno de sus cuidadores). No paran de “hablar” y llamar la atención buscando siempre ser el centro de atención. Pueden incluso llegar a mostrar agresividad si otro compañero animal u otra persona “intenta robarle” el amor o la atención de su responsable.
Es de gran ayuda en animales que vienen de abandonos o que han sido apartados de su madre y no han recibido el amor que esta esencia es en su estado positivo.
Bach hablaba de esta flor como el arquetipo de la “madre universal” en su estado positivo y cito a mi querida Maestra Susana Veilati, que la define como “un exceso de madre por falta de madre” en su estado negativo.
Dada su enorme energía femenina, físicamente es muy útil en enfermedades del aparato reproductor y desarreglos hormonales.
Son tantos los usos y las cosas que se podrían decir y escribir sobre ella que os animo a que leáis lo que dice Cristina Delgado, veterinaria holística, en su libro “Flores de Bach para perros, gatos y…dueños”