Universidad Imaginaria

¿Para que nace UNIVERSIDAD IMAGINARIA?

Hola soy Gaby, creadora de Universidad Imaginaria, creo que como madre me encontré con un problema, y es que esperaba mucho de un lugar, para dejar a mi hijo. Me tocó ir a entrevistas donde no me dejaban pasar, no podía conocer el lugar. Cada vez que preguntaba en un jardín, si trabajaban con inteligencia emocional me miraban como diciendo: ¿qué me está preguntando? Y lo cierto es que haber estado en Buenos Aires, me hacía tener otra mirada. Haber trabajado dentro de guarderías y ser psicopedagoga, me llevaron a tener más claro, lo que quería para mi hijo. Tener un paneo de lo que se viene a futuro, me hacía sentir que la escuela tradicional, no era lo que mi hijo necesitaba para de verdad sentirse exitoso en su vida, para sentirse feliz.

Quise evitarle a él, muchos años de terapia, que yo misma tuve que atravesar para poder salirme de esa educación tradicional. Esa educación que nos hace creer que todos tenemos que ser iguales, que nos hace competir entre nosotros, que nos hace compararnos con los demás y sobre todo, que nos hace creer que tener buenas notas es sinónimo de éxito!!! Lo he vivido en carne propia, tener las mejores notas no es sinónimo de éxito, ser campeona de la olimpiada de matemática, no es sinónimo de éxito…un boletín con sobresaliente de punta a punta no es sinónimo de felicidad…Creo que lo que sí es sinónimo de éxito, es el conocimiento de uno mismo. Para mí es más importante trabajar para que un niño pueda sentirse amado y para que pueda sentirse capaz. Y creo que la suma de esos dos sentimientos es lo que llamamos: Autoestima.

Ese fue mi punto de partida, quería encontrar en Salta una propuesta que tenga en cuenta eso, que mi hijo pueda estar en un ambiente en donde lo traten con amor, donde no lo etiqueten, donde cuiden su autoestima, donde se sienta amado igual que en casa. Pero que también sea un ambiente donde le procuren espacios para que se sienta capaz. Sentía que mi hijo no necesitaba una niñera, necesitaba a alguien que entienda de psicología infantil, alguien que sepa cómo ayudar a un niño a descubrir su propio potencial, sin invadirlo, sin hacer por él, sin agarrarle la mano y ayudarle a hacer los trabajitos. Quería que mi hijo vea que el regalo que le lleva a su mamá, a su papá o la carpeta que lleva a fin de año, es algo auténtico!! Algo que tiene su impronta, algo que él mismo elaboró. Quería que sienta que esa creación es una prueba de que él puede, que es capaz!! Quería y sigo queriendo que se dé cuenta que él pudo. Porque creo yo, que ser consciente de que podemos es lo que le permite a un ser humano saber que puede ir por más!! Después de eso ya no hay dudas… porque que existe en el mundo algo que él hizo solo. Hay una prueba de que es capaz de crear una realidad y eso le permite descubrir su propio potencial creador.

Hoy como directivo en coaching ontológico, reafirmo esto que veía desde la psicopedagogía, esto que veía desde la maternidad, de una maternidad que me llego tardía para algunos y en el momento perfecto para mí: 38 años. Y a mis 38 años, mi visión del mundo fue diferente a la que pude tener a los 16. Y de repente me permitió ver, que es lo que buscaba para mi hijo. Desde otro lugar, desde la experiencia de haberla pasado mal y buscar de verdad cuales son las cosas que me faltaron, que no fue matemática, ni lengua, ni inglés: fue amor propio. Y desde ese lugar es que nace la propuesta, que yo considero, es equilibrada y tiene en cuenta que el niño no es solo mente, el niño es mente pero también es cuerpo, pero sobre todas las cosas es emoción. El niño tiene corazón y siente emociones y las emociones lo atraviesan y como lo atraviesan es muy importante ayudarlo a que tenga herramientas para gestionar estas emociones, porque es desde ahí, desde donde él va a lograr transformar su mundo, desde ahí va a lograr crear para él las realidades que quiere ¿y si no es desde uno mismo? ¿Desde dónde? me pregunto…Si todo, no nace en la confianza que me tengo a mi mismo, en el valor que me doy a mí mismo, en la importancia que me doy a mí mismo… ¿dónde comienzan las cosas? Así que hoy escribo para todas las personas que piensan como yo. Para los que sienten que el ser humano tiene que ser primero protagonista, para después ser creador de su realidad. Para los que creen que un niño primero tiene que sentir que puede, para después poder crear!!!

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