31/10/2025
Después de los 30 años, el cuerpo de la mujer empieza a cambiar: el metabolismo se desacelera, el ciclo menstrual puede volverse diferente y las hormonas comienzan a influir más en la energía, el peso e incluso en el estado de ánimo.
Por eso, cuidar la alimentación es esencial — y algunos nutrientes terminan quedando olvidados.
🦴 Calcio: fuerza para huesos y dientes
El calcio es el principal nutriente para mantener los huesos fuertes y prevenir enfermedades como la osteopenia y la osteoporosis, que afectan a muchas mujeres después de los 40.
Con el tiempo, el cuerpo absorbe menos calcio, por lo que es importante reforzar su consumo.
Dónde encontrarlo: leche y derivados, sardina con espina, tofu, brócoli y col rizada.
👉 Consejo: prefiere los lácteos con menos grasa y trata de consumir alimentos ricos en calcio todos los días.
🩸 Hierro: energía y vitalidad
El hierro es esencial para evitar la anemia y el cansancio excesivo.
Durante la menstruación, muchas mujeres pierden hierro — y esto se suma al ritmo acelerado del día a día, la mala alimentación y el bajo consumo de proteínas.
Dónde encontrarlo: carne roja magra, pollo, frijoles, lentejas, espinaca y betabel.
👉 Consejo: combina alimentos ricos en hierro con frutas cítricas (naranja, acerola, limón), ya que la vitamina C ayuda en su absorción.
🌾 Fibra: intestino activo y saciedad
La fibra ayuda a que el intestino funcione mejor, controla el colesterol y aumenta la sensación de saciedad — lo que evita los excesos en las comidas.
Después de los 30, es común que el intestino se vuelva más “lento”, especialmente si hay poca agua y movimiento en el día a día.
Dónde encontrarla: frutas con cáscara, verduras, legumbres, avena, chía, linaza y pan integral.
👉 Consejo: bebe suficiente agua junto con la fibra — ¡solo así funciona bien!