11/10/2025
A veces no entendemos por qué reaccionamos con tanta intensidad ante ciertas situaciones…
Pero si miramos con amor, descubrimos que no es el adulto el que está dolido, sino el niño interior que un día se sintió ignorado, rechazado o exigido.
Ese niño aprendió a callar para no molestar, a sonreír para ser aceptado, a ser fuerte para no perder el amor de los demás.
Hoy, ese silencio pesa en forma de ansiedad, miedo o cansancio emocional.
Sanar no es culpar a nadie, es atreverte a mirar lo que te dolió, darle voz a ese niño y abrazarlo con compasión.
🌿 Permítete sentir.
— Mi Consultorio Emocional