25/11/2019
BREVE INTRODUCCIÓN AL PARADIGMA ORTOMOLECULAR: DIFERENCIA ENTRE EL PARADIGMA CONVENCIONAL Y EL ORTOMOLECULAR.
De acuerdo al método científico hipocrático se considera que los hombres comieron correctamente durante miles de años guiándose solo por su instinto.
Sin necesidad de utilizar ningún otro método que los guiara, medio de investigación que les explicara lo que comían, por que comían, lo que deberían comer, que propiedades poseían los alimentos que componían su dieta, o si estaban bien o mal las cantidades, proporciones o combinaciones de sus alimentos y sus nutrientes, el hombre comió guiado por su instinto durante millones de años, teniendo una vida sana y longeva.
Existe un hecho más elocuente que cualquier argumentación: el hombre encontró desde el principio, guiado solo por su instinto, el alimento que le permitió vencer las condiciones ambientales adversas, sobrevivir a los cambios geológicos y ambientales, elevarse sobre las demás especies y conseguir tal desarrollo físico y mental que le permitió descubrir el fuego, inventar la rueda, consolidar su futuro orientando su progreso y llegar a la cima de la civilización.
El hombre actual sin embargo, es otro: con el devenir de la civilización industrial modificó y complicó su alimentación, acalló sus instintos, degeneró sus gustos, envició sus hábitos, relajó y envileció sus costumbres primitivas de austeridad, sobriedad y frugalidad.
TRANSICIÓN ALIMENTARIA
Los cambios en el medio ambiente y la alimentación efectuados durante los últimos 150 años, han repercutido drásticamente en el estado de salud y calidad de vida de las poblaciones humanas. La modificación medioambiental y alimentaría producto de la era industrial, ha cambiado radicalmente el entorno molecular de las células que componen el organismo humano, produciendo un estado de inadaptación que finalmente tarde o temprano se traduce en un severo deterioro de de la salud física y mental y de la calidad de vida.
La alteración molecular del medio ambiente y la alimentación, somete al cuerpo humano a tensiones químicas que incrementan de manera artificial y antinatural la demanda de diversos nutrientes.
Cuando esa demanda extra de nutrientes es satisfecha de manera óptima, el organismo humano se adapta a la tensión y se produce un estado satisfactorio de regeneración celular; en cambio, cuando dicha demanda no es satisfecha, sobreviene un estado de degeneración y/o muerte celular que finalmente se traduce en diversos malestares, trastornos y enfermedades.
DIETÉTICA Y NUTRIOLOGÍA CONVENCIONAL
La dietética convencional pretenden resolver este problema recomendando una dieta “saludable” variada y equilibrada, pero, compuesta de una variedad y combinación de productos “comestibles artificiales”, que previamente no existían y de alimentos naturales pero producidos en condiciones que deterioran su valor nutricional.
La proporción de macronutrientes recomendada contiene una elevada cantidad de carbohidratos de rápida digestión y asimilación, que se mantiene en un rango de entre un 60 a un 70 % de la ingesta calórica total, sin distinguir entre simples y complejos, y entre refinados e integrales. Además, recomienda y permite el consumo de todo tipo de aceites industrializados cuyos ácidos grasos poliinsaturados han sido molecularmente deformados, siendo son biológicamente inactivos y algunos severamente tóxicos.
Y la nutriología convencional en el mejor de los casos tímidamente recomienda algunos complementos nutritivos la mayoría de las veces con las dosis mínimas recomendadas.
En resumen este método proporciona un exceso de calorías en forma sobre todo de carbohidratos, aceites y grasas refinadas, artificialmente concentradas, y en cuanto a micronutrientes indica consumir únicamente Ración Diaria Recomendada (RDA), o Cantidad Diaria Recomendada (CDR) de micronutrientes, que son las dosis mínimas para evitar enfermedades carenciales.
En otras palabras, la dietética y la nutriología convencional intentan procurar un estado de nutrición promedio, con una salud promedio, que resulta ser severamente degradada, estado de salud al que algunos expertos denominan mesotrofia.
DIETÉTICA Y NUTRIOLOGÍA ORTOMOLECULAR
En contrapartida, la dietética ortomolecular recomienda suprimir cien por ciento todos los “comestibles artificiales” elaborados con ingredientes refinados y aditivos químicos; y una dieta compuesta únicamente por alimentos naturales, integrales y de preferencia orgánicos.
Recomienda reducir la ingesta total de carbohidratos aun cuando estos sean naturales e integrales a proporciones cercanas a un 40 % del consumo calórico total. Respecto a los micronutrientes, la nutriología ortomolecular recomienda formulas con dosis óptimas y personalizadas de nutrientes, las cuales en algunos casos pueden ser sumamente más elevadas que las dosis mínimas recomendadas.
Algunas enfermedades se tratan con megadosis (óptidosis) de micronutrientes y se utilizan al mismo tiempo una amplia gama de fitonutrientes, fibras dietarias, enzimas, coenzimas, probióticos, y algunas plantas aromáticas y medicinales.
En resumen este método recomienda proporcionar a cada persona de manera incivilizada, una cantidad moderada de calorías en forma de carbohidratos, aceites y grasas solamente naturales, y sugiere satisfacer la necesidad de micronutrientes de la manera lo más óptima posible para cada persona en lo particular.
En otras palabras, pretende lograr un estado de nutrición óptima, con una salud óptima y fortalecida, superior al promedio normal de la salud de los seres humanos.
Miguel Leopoldo Alvarado Saldaña