27/11/2025
Apretar la mandíbula nunca ha sido solo un hábito nocturno. (O de vigilia)
Nunca ha sido “estrés” dicho a la rápida.
Y nunca ha sido falta de voluntad.
Cuando el bruxismo severo aparece, aparece porque en algún momento de tu vida tu cuerpo tuvo que sostener más de lo que podía procesar.
Y lo hizo tensando, apretando, conteniendo… como un gesto de protección.
Por eso, trabajar el bruxismo no es solo relajar músculos.
Es trabajar historia corporal, patrones de alerta, memorias somáticas y formas de sobrevivir que se hicieron automáticas.
Es mirar al sistema nervioso con respeto, entendiendo que todo lo que hace tiene sentido.
La ciencia hoy lo respalda con claridad:
• la mandíbula participa en el circuito de defensa,
• la tensión crónica se vincula con estrés persistente, trauma temprano y sobreexigencia,
• y el cuerpo aprende a protegerse incluso cuando la mente no lo recuerda.
Autores como Bessel van der Kolk, Gabor Maté, Alice Miller y Moshe Feldenkrais han descrito durante décadas esta relación entre cuerpo, emoción y supervivencia.
Eso es lo que hacemos en Reset Bruxismo:
mirar el bruxismo como un mensaje, no como una falla; integrar evidencia científica y educación somática;
abrir un camino donde tu cuerpo deja de ser un enemigo y empieza a ser tu principal fuente de información y cuidado.
Si algo de esto te hace sentido, si sientes que tu cuerpo lleva tiempo hablándote, aquí encuentras un lugar para comprenderlo de verdad.
Escribe RESET para saber más.