17/04/2025
Carta de una madre a su hija:
Amor de mi vida, perdón por traerte al mundo aún siendo tan jóven e inconsciente.
No sabía la gran responsabilidad que conlleva ser madre, ni dimensionaba el impacto que tiene mi vida sobre la tuya.
Perdón por no haberte dado un hogar “funcional”, que más hubiese querido que un hogar para ti en dónde mamá y papá se amaran y se respetaran, pero tu padre aún joven e inconsciente como yo, tuvo comportamientos que no quise tolerar más en mi vida.
Sin embargo estuve siempre ahí, contigo, abrazándote cada noche y cada madrugada, pintándote arcoíris e inventándote historias de fantasía aunque por dentro estuviese desecha.
Fuimos fuertes y seguimos adelante, tu amor me impulsó mas allá de lo que pude imaginar.
Ser padre y madre fue un gran desafío en mi vida, pero creo que pude hacerlo de la mejor manera. O por lo menos eso intenté cada día desde que naciste. Con mi graduación llegó el trabajo duro, y tuve que dejarte mucho tiempo sola, me hubiera encantado estar más presente, haber jugado contigo muchos más días a las muñecas, haber sido yo la que te enseñara a montar bicicleta, pero la necesidad me obligaba a trabajar cada día más fuerte, anhelando que nunca te faltara nada y poder hacerte feliz con todo lo que me pidieras.
Hoy ya eres una adolescente, llevas en tu corazón heridas que yo como madre y sin intención alguna te causé, desde mi inconsciente, mi ignorancia y mi poca sabiduría. Ojalá hubiese leído sobre crianza efectiva, amor consciente o sobre lo que es una sana relación de pareja, así no hubiese permitido tantas cosas en nuestras vidas. Ojalá hubiese sido más valiente para separarme mucho antes de quién inconsciente o conscientemente nos lastimaba.
Hoy te prometo ser mejor cada día, por y para ti, estarás orgullosa, jamás permitiré que mis elecciones vuelvan a lastimarte. Cada mañana me despierto con la ilusión de construir un futuro brillante en el que tú siempre sonrías y recuerdes con ilusión. Intento reconstruir los pedazos de mi alma, ser una mujer ejemplar de la cual te sientas orgullosa al llamar mamá. Una mujer con voz, que sabe poner límites y valorarse, quiero inspirarte, no avergonzarte.
Te ama por siempre, Mamá.