12/01/2022
😞 Hola, un demonio con traje de cirujano arruinó mi vida, esta es mi historia…
✍️ Mi nombre es Katherine, tengo 20 años, todo comenzó el 28 de agosto del año 2016; cuando me diagnosticaron cifosis de scheuermann, a la edad de 14 años.
No hubo muchas opciones, simplemente fue analgesia como paso 1, y el paso 2 fue cirugía.
Lo primero que me ordenó el cirujano fue una resonancia de columna, para posterior haverme una cirugía, el radiólogo me dijo que la desviación que tenía no era suficiente para hacerme cirugía.
Sin embargo…Confié en él.
El 1 de junio del año 2017 a la edad de 15 años, me implantaron 2 barras de titanio más 12 tornillos, tuvo una duración de 8 horas en quirófano, la recuperación fue lenta y dolorosa. Al pasar el tiempo empecé a notar algunos nudos en mi columna, sentía fuertes chuzones, me veía más encorvada, los dolores eran más intensos. Consulté de nuevo con el doctor tratante, su respuesta al verme fue: “seguramente creció unos cuantos centímetros después de la cirugía lo cual ocasionó que el material se corriera”.
No quedé a gusto con su respuesta, así que decidí buscar opiniones, opciones, en otras clínicas, busqué por internet, y encontré un doctor demasiado profesional… para resumirles… este nuevo especialista me dijo: “Jamás necesitaste una cirugía, fuiste víctima de los cirujanos que operan para lucrarse y no para cambiar vidas”.
No podía hacerle cirugía correctiva porque corría el riesgo de quedar con cuadriplejia.
Pasaron unos meses, y de repente la enfermedad empezó a avanzar de manera significativa, me preguntaba el por qué, desesperada y sin saber que hacer, tomé la decisión de ir por consulta con varios especialistas en columna, todos llegaron a la conclusión de que las cirugías estuvieron mal hechas, en especial la primera, ya que en los documentos aquel doctor habla de una “cifoescoliosis” y resultó operándome por “escoliosis” (que nuca tuve) y descuidó la “cifosis” que es la enfermedad que siempre he tenido, y por la cual actualmente estoy sufriendo.
Ayúdenme todos a tener el valor para hacerle una denuncia publica a este “doctor” que seguramente sigue haciendo mucho daño.