08/08/2025
Soldados sin coraza ganaron la victoria; su varonil aliento de escudo les sirvió."
Como aquellos patriotas aguerridos que lo entregaron todo en la batalla decisiva por la independencia, hoy nosotros también alzamos la voz, con el pecho henchido de orgullo patrio conmemorando el glorioso 7 de agosto de 1819, fecha en la que "el yugo inhumano cayó" y nuestra patria empezó a forjarse libre.
Hoy nuestros colores no fueron los mismos seis de nuestra bandera diversa, sino que el estandarte ondeó en tres franjas: amarillo, azul y rojo, los tres colores de nuestra bandera, reflejo del coraje de un pueblo que no se rinde, como en el canto inmortal del Himno Nacional, como símbolo de la patria que queremos ver; donde la libertad sea plena, la diversidad se respete, y la igualdad no sea una promesa, sino una realidad, sin homofobia, sin racismo, sin exclusión ni violencia; donde podamos vivir con dignidad, donde los prejuicios no tengan cabida y el respeto sea la base de nuestra convivencia.
Hoy, como ayer, seguimos en lucha. No con armas, sino con la fuerza de la voz, de la visibilidad porque la diversidad también hace patria; y como cantamos con el alma:
"En surcos de dolores, el bien germina ya."