20/03/2021
Hoy les quiero escribir sobre las familias reconstruidas. Si tú piensas que el divorcio es la destrucción de tu familia, ese pensamiento se lo vas a transmitir a tus hijos, y el problema con esto es que no es para nada real.
El divorcio no destruye la familia, solo la transforma. Los prejuicios con respecto a este tema es lo que hace que el proceso sea fácil o difícil. Una familia puede tener muchas formas y por lo general cambia constantemente, ya sea porque alguno de los padres muere, o porque se divorciaron y las personas se volvieron a casar, pueden haber hijos de diferentes matrimonios, etc... No solo la familia tradicional de papá, mamá e hijos es la ideal.
En todos esos casos la familia NO se destruye, solo se reconstruye. No se debe pensar que la nueva estructura va a remplazar la familia inicial donde nacieron los hijos, es simplemente una extensión de la misma.
Debemos entender que lo importante en estos casos no es quienes ni cuantos conforman la familia, sino la calidad de las personas que hacen parte.
Cuando se reconstruye una familia lo importante es vivir el duelo, saber que este toma tiempo para todos los integrantes de la familia, pero sobre todo entender que los cambios no son fáciles y que lo mejor es aprender de los errores para no repetirlos.
Sería maravilloso decirle a los hijos, esto no es por tu culpa, es cosa de tu padre y yo. Pero así de fácil no es, ellos también deben vivir su propio duelo, por eso hay que respetar esto y si ves que les está costando el nuevo cambio, buscar ayuda profesional como psicólogos o terapias para ayudarlos a expresar sus sentimientos de una manera sana. Algunos padres creen que solo dejar de hablar sobre el tema o distraer a los hijos resolverá el problema, pero no es así, al tomar esta actitud lo único que se logra es que los hijos se estanquen y no logren sanar de manera adecuada. Aquí lo importante es hablar mucho con ellos, tener en cuenta sus sentimientos y sus necesidades.
Enséñales que ser positivo y enfocarse en lo bueno de las situaciones, las personas y de todo lo que pasa en nuestro día a día es la mejor manera de afrontar los cambios.