17/11/2020
Ejercicio diario e hidratación saludable.
Siempre al realizar ejercicio los músculos producen calor este debe eliminarse para mantener la temperatura corporal.
Te ayudaremos a eliminar este calor con hidratación saludable ya que el agua sirve de transportador de calor a través de la sangre y de refrigerante que a su vez elimina el exceso de calor a través de la evaporación de sudor en la piel.
La tasa de sudoración en varios deportes muestra variación significativa en el promedio que va (desde 0,28 hasta 2,38 Litros/hora), dependiendo del tipo e intensidad de la actividad, estos son los litros que perdemos dependiendo la actividad y el lugar de la actividad.
• Natación: 0,4 L
• Fútbol: 1,5 L
• Tenis: 1,6 L
• Carrera: 1,8 L
La cantidad de sudor producido aumenta con la intensidad del ejercicio, pero también con la temperatura y la humedad ambiental.
La actividad física hace que los requerimientos de agua aumenten de forma paralela a la pérdida de sudor. Si no se satisface este aumento, el organismo puede entrar en estado de deshidratación.
Está probado que la deshidratación tiene un efecto negativo durante el ejercicio. Además, se ha demostrado que la deshidratación aumenta el ritmo cardiaco y la temperatura corporal: el corazón tiene que trabajar a mayor velocidad cuando el volumen de plasma se reduce para mantener la entrega de oxígeno y nutrientes a los músculos.
Numerosos estudios, revisados bajo la posición del Colegio Americano de Medicina del Deporte (ACSM), mostraron que la deshidratación aumenta la tensión fisiológica y el esfuerzo percibido para desempeñar el mismo trabajo físico, y que el clima cálido aumenta dichos fenómenos. El ACSM también considera que la deshidratación por arriba de del 2% de la masa corporal puede causar deterioro en el desempeño del ejercicio aeróbico y, por lo tanto, el desempeño en la resistencia.
Recomendaciones:
Se recomienda beber antes, durante y después del ejercicio, el volumen suficiente para recuperar las pérdidas de agua sin esperar a que la sensación de sed aparezca.
Para el ejercicio con duración menor a una hora, el agua es suficiente para cubrir las necesidades del organismo.
Un estudio reciente llevado a cabo en niños por Kavouras et al, confirma estos resultados, demostrando que simplemente el hecho de mejorar el estado de hidratación, (a través de educación y facilitando el acceso al agua) puede mejorar el desempeño en atletas jóvenes que realizan ejercicio bajo condiciones climáticas de calor.