07/11/2025
🕰️💤 𝐄𝐥 𝐜𝐚𝐦𝐛𝐢𝐨 𝐝𝐞 𝐡𝐨𝐫𝐚 𝐲 𝐧𝐮𝐞𝐬𝐭𝐫𝐨 𝐫𝐢𝐭𝐦𝐨 𝐢𝐧𝐭𝐞𝐫𝐧𝐨: ¿𝐩𝐨𝐫 𝐪𝐮é 𝐧𝐨𝐬 𝐜𝐮𝐞𝐬𝐭𝐚 𝐭𝐚𝐧𝐭𝐨 𝐚𝐝𝐚𝐩𝐭𝐚𝐫𝐧𝐨𝐬?
Cada año, cuando el reloj se adelanta o se atrasa, muchos notamos algo más que una simple hora de diferencia. En los primeros días de noviembre, en Canarias ya hemos vuelto al horario de invierno y, aunque parezca un pequeño ajuste, el cuerpo lo percibe con una precisión sorprendente. Hay quien siente más sueño de lo habitual, quien despierta a deshora o quien se pasa el día con una sensación extraña, como si su mente y su cuerpo no terminaran de sincronizarse.
Esto tiene una explicación muy clara: nuestro reloj biológico interno, el llamado “ritmo circadiano”, no se adapta tan rápido como el reloj de la pared.
🌙 𝑳𝒂 𝒎𝒂́𝒒𝒖𝒊𝒏𝒂 𝒊𝒏𝒕𝒆𝒓𝒏𝒂 𝒒𝒖𝒆 𝒈𝒐𝒃𝒊𝒆𝒓𝒏𝒂 𝒏𝒖𝒆𝒔𝒕𝒓𝒂𝒔 𝒉𝒐𝒓𝒂𝒔
El cuerpo humano tiene un “reloj maestro” que regula cuándo tenemos sueño, cuándo sentimos hambre o cuándo somos más productivos. Este sistema está dirigido por una pequeña región del cerebro llamada núcleo supraquiasmático, situada en el hipotálamo.
Ese reloj se ajusta principalmente por la luz natural: cuando amanece, el cuerpo entiende que es hora de activarse; cuando oscurece, empieza a liberar melatonina, la hormona que nos ayuda a dormir.
El problema es que al cambiar la hora, alteramos esa relación natural con la luz solar. Durante unos días (a veces incluso semanas), nuestro reloj interno se desajusta. Es lo que los especialistas llaman “jet lag social”, una especie de mini desfase horario sin necesidad de subirnos a un avión.
☕ 𝑺𝒊́𝒏𝒕𝒐𝒎𝒂𝒔 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝒅𝒆𝒔𝒄𝒐𝒏𝒆𝒙𝒊𝒐́𝒏 𝒄𝒊𝒓𝒄𝒂𝒅𝒊𝒂𝒏𝒂
Quizás lo hayas notado: te cuesta conciliar el sueño, te despiertas antes de tiempo, o pasas el día con una ligera sensación de cansancio que no sabes de dónde viene.
Estos son los síntomas más habituales del cambio de hora:
Dificultad para dormir o para mantener el sueño.
Sensación de somnolencia durante el día.
Cambios en el apetito o digestiones más lentas.
Dificultad para concentrarse.
Irritabilidad o sensación de “bajón” emocional.
En la mayoría de las personas, este desequilibrio dura pocos días, pero en quienes tienen horarios muy estructurados, niños pequeños o personas mayores, el proceso puede alargarse un poco más.
☀️ 𝑪𝒐́𝒎𝒐 𝒓𝒆𝒄𝒐𝒏𝒆𝒄𝒕𝒂𝒓 𝒆𝒍 𝒓𝒆𝒍𝒐𝒋 𝒊𝒏𝒕𝒆𝒓𝒏𝒐
La buena noticia es que podemos ayudar al cuerpo a readaptarse de forma natural. Aquí te dejamos algunas recomendaciones sencillas pero muy eficaces:
Aprovecha la luz del día. Sal a caminar o desayuna cerca de una ventana. La luz solar matutina es el mejor estímulo para reajustar el ritmo circadiano.
Evita pantallas antes de dormir. La luz azul de móviles y tablets retrasa la producción de melatonina, dificultando el sueño. Si puedes, desconecta al menos una hora antes de ir a la cama.
Cena ligero y temprano. Las cenas copiosas o tardías obligan al cuerpo a seguir activo cuando debería relajarse. Opta por comidas suaves y deja pasar un par de horas antes de acostarte.
Mantén horarios regulares. Aunque tengas sueño, intenta acostarte y levantarte siempre a la misma hora. Esa constancia es la que ayuda al cerebro a “reprogramarse”.
Evita el exceso de cafeína o alcohol. Pueden alterar la calidad del sueño, incluso si te ayudan a conciliarlo.
Haz ejercicio, pero a la hora adecuada. Practicar actividad física al aire libre, sobre todo por la mañana, ayuda a sincronizar los ritmos biológicos. Evita hacerlo justo antes de dormir.
Cuida tu entorno de descanso. Un dormitorio oscuro, tranquilo y con temperatura fresca facilita la conciliación del sueño.
🌜 𝑬𝒍 𝒄𝒂𝒎𝒃𝒊𝒐 𝒅𝒆 𝒉𝒐𝒓𝒂 𝒚 𝒍𝒂 𝒔𝒂𝒍𝒖𝒅 𝒎𝒆𝒏𝒕𝒂𝒍
No solo el sueño se ve afectado. Hay estudios que indican que el cambio de hora puede influir también en el estado de ánimo. La reducción de horas de luz natural puede hacernos sentir más apáticos o tristes, especialmente en los meses fríos.
Por eso, es fundamental mantener rutinas que aporten bienestar emocional: hacer algo de ejercicio, mantener el contacto social, escuchar música o practicar actividades relajantes como la meditación o la lectura.
El sueño y la salud mental están estrechamente conectados. Dormir bien no solo repara el cuerpo; también regula nuestras emociones y nuestra capacidad para adaptarnos a los cambios.
💤 𝑳𝒂 𝒎𝒆𝒍𝒂𝒕𝒐𝒏𝒊𝒏𝒂: 𝒍𝒂 𝒂𝒍𝒊𝒂𝒅𝒂 𝒅𝒆 𝒏𝒖𝒆𝒔𝒕𝒓𝒐 𝒓𝒊𝒕𝒎𝒐 𝒏𝒐𝒄𝒕𝒖𝒓𝒏𝒐
La melatonina es una hormona natural que nuestro cuerpo produce cuando cae la noche. Es como una señal que indica: “es hora de descansar”.
Durante los primeros días tras el cambio de hora, esta producción puede descoordinarse. Algunas personas optan por suplementos, pero lo más recomendable es intentar estimular su producción natural:
Atenúa las luces del hogar por la noche.
Evita pantallas brillantes.
Crea un ritual de descanso relajante.
Con unos pocos días de constancia, el organismo suele recuperar su equilibrio de forma espontánea.
🌅 𝑬𝒏 𝑪𝒂𝒏𝒂𝒓𝒊𝒂𝒔, 𝒍𝒂 𝒍𝒖𝒛 𝒆𝒔 𝒏𝒖𝒆𝒔𝒕𝒓𝒂 𝒎𝒆𝒋𝒐𝒓 𝒂𝒍𝒊𝒂𝒅𝒂
Una ventaja que tenemos en las Islas Canarias es nuestra luminosidad y clima suave. A diferencia de otros lugares de Europa, disfrutamos de muchas horas de sol incluso en invierno.
Aprovechar esa luz natural es una manera sencilla y saludable de mantener el ánimo y los ciclos biológicos en equilibrio. Un paseo por la mañana o una pausa al sol en la hora del almuerzo puede marcar la diferencia entre sentirnos cansados o revitalizados.
🌻 𝑷𝒂𝒓𝒂 𝒓𝒆𝒄𝒖𝒑𝒆𝒓𝒂𝒓 𝒆𝒍 𝒓𝒊𝒕𝒎𝒐, 𝒏𝒐 𝒕𝒆 𝒂𝒑𝒓𝒆𝒔𝒖𝒓𝒆𝒔
El cuerpo humano tiene su propio compás. Es importante escucharlo, darle tiempo y cuidarlo con pequeños gestos diarios. Dormir bien no es solo cuestión de horas, sino de calidad. Y esa calidad depende, en gran medida, de respetar nuestros ritmos naturales.
Ajustarse al nuevo horario puede ser una buena oportunidad para revisar hábitos, mejorar rutinas y redescubrir la importancia del descanso como pilar del bienestar.
🌿 En el Centro Médico Villar e Ibarra, creemos que la salud comienza con la información y el autocuidado. Por eso compartimos estos consejos: para acompañarte en cada cambio, en cada estación, y ayudarte a mantener tu cuerpo y mente en armonía con el tiempo… el de fuera y el de dentro. 💚