26/12/2024
¿Y si te dijera que no estás realmente viviendo?
Hace unos años, vivía en piloto automático. Me levantaba, trabajaba, entrenaba, dormía... y repetía. Creía que todo estaba "bien", pero había una sensación de vacío que no entendía. Hasta que me topé con una frase que me cambió:
"No puedes cambiar lo que no reconoces."
Y ahí empezó todo: descubrí que la consciencia no es solo estar presente, sino observar tus pensamientos, entender tus emociones y elegir tus acciones con intención.
Empecé a "entrenar" mi consciencia como si fuese un músculo:
1️⃣ Reflexión diaria: ¿Qué hice hoy? ¿Cómo me sentí?
2️⃣ Respirar profundamente: Un minuto al día para parar y escucharme.
3️⃣ Ser curioso: Cuestionarme. ¿Por qué pienso esto? ¿De dónde viene?
La transformación fue brutal: más claridad, menos estrés, mejores decisiones. La consciencia no solo afecta tu mente, también tu cuerpo y energía.
Cuando eres consciente, dejas de reaccionar impulsivamente, tomas el control de tu vida y empiezas a vivir con propósito.
¿Quieres elevar tu consciencia? Empieza ahora. Dedica 5 minutos a observar tus pensamientos sin juzgarlos. Puede parecer pequeño, pero con el tiempo, cambiará tu vida.
📌 Hazme saber en los comentarios si estás dispuesto a intentarlo.
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