15/12/2015
DIETA PRE-NAVIDAD :)
Se aproximan días en los que vamos a llenar el estómago con esos platos de los que prescindimos durante el año, ya sea por su coste o por su complejidad. Grandes sabores pero por los que tenemos que pagar grandes costes: un aumento de las grasas y de los azúcares en el cuerpo.
¿Podemos prevenirlo con anterioridad?
Ya sabemos que lo correcto sería llevar siempre una dieta equilibrada, sana y completa con aporte mínimo de alimentos ricos en grasas y azúcares simples (embutidos grasos, bollería industrial, snacks, etc.) Aún así, para prevenir los excesos, os recomiendo una sencilla rutina diaria con la que llegar perfectas/os a Navidad.
DIETA DIARIA
1.- El desayuno debe ser completo puesto que, al ser la primera comida del día, será la que nos aporte el mayor grado de energía:
* Un lácteo, a ser posible desnatado.
* 30 gr de cereales sin azúcar o 50 gr de pan.
* Una pieza de fruta.
2.- La comida:
* Primer plato a base de pasta, arroz, legumbres o patatas con verduras.
* Segundo plato compuesto por un alimento proteico bajo en grasa como el pollo, el pavo, el conejo, el pescado o el marisco.
* Como postre Una pieza de fruta
3.- La cena tiene que ser ligera ya que, mientras dormimos, es cuando más calorías acumulamos:
* Primer plato compuesto de verduras.
* El segundo plato conviene que sea pescado, huevo o carne a la plancha.
* Como postre tomaremos un yogur desnatado.
Esto hay que completarlo con otras dos tomas al día, convenientemente a media mañana y media tarde, en las que podemos elegir entre una pieza de fruta, un yogur (desnatado) o una pieza de fiambre magro.
Os recomiendo no omitir las grasas los días de antes ya que son necesarias para el organismo. Sí que podemos prestar especial atención a su calidad, es decir, podemos prescindir de carnes grasas, lácteos cremosos o quesos curados, mantequillas y productos de pastelería y bollería. Las grasas procedentes del aceite de oliva, del pescado azul o de los frutos secos debemos mantenerlas.
CONSEJOS
Lo primero de lo que debes concienciarte es que no te puedes obsesionar con el peso en esos días. Tienes que conseguir ordenar tu alimentación contrarrestando los días que más excesos consumes, con otros en los que disfrutes de una alimentación más ligera. Si sigues este consejo tu peso variará lo mínimo.