01/12/2025
El invierno no solo afecta a tu piel… también a tus ojos. Las bajas temperaturas, la calefacción y el aire seco pueden provocar irritación, lagrimeo excesivo y sensación de arenilla.
Aquí tienes algunos hábitos sencillos que marcarán la diferencia:
Hidrata tus ojos
Usa lágrimas artificiales si notas sequedad por el frío o la calefacción.
Protege tus ojos al aire libre
El viento frío puede irritarlos. Utiliza gafas de sol o pantallas protectoras, incluso en días nublados.
Evita la calefacción directa
El aire caliente reseca la superficie ocular. Intenta no situarte justo frente a estufas o salidas de aire.
Parpadea más si trabajas con pantallas
En invierno parpadeamos menos y eso aumenta el ojo seco. Haz pausas visuales cada 20 minutos.
Mantén una buena higiene ocular
El frío puede empeorar la blefaritis o el ojo seco. Una rutina de higiene ayuda a evitar inflamación.
Cuidar tus ojos en invierno es sencillo… y fundamental.
En el Centro Oftalmológico de Elche analizamos tu caso y te damos las recomendaciones más adecuadas para ti.
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