03/12/2025
El yoga no exige variedad, exige honestidad, refinar la presencia, por eso durante las sesiones volvemos una y otra vez a ciertas porturas, pero no repetimos porque cada vez que volvemos es distinta, cambia nuestra respiración, cambia nuestra mente, se afina la escucha y nuestra consciencia.
La repetición nos da profundidad, nos permite observar hasta lo más sutil, como me tiemblan los brazos, como se revuelven mis emociones y hasta como un día casi sin darnos cuenta algo se libera y nos sentimos más libres.