27/11/2025
La habilidad para autoregular lo que sentimos es imprescindible para que
nuestra vida nos resulte manejable.
Solemos hacerlo a través de acciones (visibles o no): fumar, cantar, pensar, razonar, beber, cocinar, dialogar, discutir,gritar, pasear, llorar…
Autoregularse puede hacerse de una forma beneficiosa tanto a corto como a largo plazo (o de formas que, aunque funcionen a la corta, a la larga nos generan más dolor).
Todas ellas son adaptativas, y cumplen una función: calmarnos. Aunque el “pan para hoy” a veces es la única opción, lo mejor es no quedarse siempre con “hambre para mañana”.
Entrenar habilidades de autoregulación constructiva es una opción, y es una de las cosas que se trabajan en terapia. Por descontado, lo que aquí te ofrezco son maneras de manejar lo que sentimos cuando ya nos hemos “saturado”.
Otra cosa es la prevención (no siempre posible claro), que tiene más que ver con hacernos conscientes de cómo manejamos las diferentes situaciones de nuestra vida. Y tomar decisiones más conscientes.
