24/09/2024
Revisar nuestras creencias acerca de cómo y cuándo debemos ser productivos puede salvarnos de culpabilizarnos. Cuánto podemos dar, siempre va a ir de la mano de cuánto tenemos hoy para dar y para eso tenemos que preguntarnos cómo estamos.
No soy la misma si he descansado que si no, si estoy triste o si estoy contenta, si ayer me dediqué a mi o no…no soy la misma cada día y mi productividad tampoco puede serlo. Si siempre estoy en un estándar, en un debería, sin permitirme escucharme posiblemente acabe en una espiral de culpa y frustración en la que el cansancio se apodere de mí y acabe quemándome con aquello que me gustaría amar.