21/10/2025
💔 "Las herencias que quiero devolverte, mamá"
No quiero heredar tu miedo a no tener dinero, mamá.
Ese miedo que te hacía revisar una y otra vez la alacena, aunque ya sabías lo que había allí.
Ese temor que te enseñó a sobrevivir, pero que nunca te permitió realmente vivir.
Quiero devolvértelo con todo el respeto y el amor que te mereces, porque sé cuánto luchaste con él.
Tampoco deseo heredar tu costumbre de poner a todos antes que a ti misma.
Esa herencia silenciosa de mujeres que se quedaban con lo que sobraba:
el último pedazo de pan, el último descanso, el último deseo.
Quiero devolver esa carga, mamá, con gratitud, pero también con conciencia.
No quiero heredar tu culpa por descansar, ni tu vergüenza por desear más.
No quiero ese manual de “mujer buena” que te enseñaron, donde sacrificarse era sinónimo de amor,
y callar era el símbolo de fortaleza.
Sí, quiero heredar tu fuerza, pero no tu cansancio.
Tu amor, pero no tu miedo.
Tu dignidad, pero no tu silencio.
Ahora entiendo que muchas de tus renuncias no eran elecciones, sino heridas profundas.
Y esas heridas también se heredan, aunque nadie hable de eso, aunque nadie las vea.
Por eso, mamá, esta vez no quiero continuar con la cadena del dolor.
Quiero honrarte sanando lo que te dolió,
para que las heridas no sean más que historias que sanan en el tiempo.
Deseo que la herencia que mis hijos reciban de mí no sea miedo, sino paz.
No sea carencia, sino abundancia emocional.
No sea culpa, sino libertad.
Gracias por lo que me diste sin tenerlo, por tu amor silencioso, por tu lucha invisible.
Y perdón si devuelvo lo que nunca fue realmente mío:
tu miedo, tu culpa, tu cansancio.
Hoy, con todo mi corazón, decido quedarme solo con lo que me hace crecer,
con lo que me llena de vida, de amor y de esperanza.
Porque sanar también es una forma de amar,
y honrar a mamá no es repetir su historia, sino escribir una nueva donde ella también pueda descansar plenamente.