25/01/2017
Cómo iniciar y mantener el hábito de realizar ejercicio físico.
Una de las formas más habituales para comenzar a realizar ejercicio físico es apuntarse a un gimnasio. Paradójicamente esta es una de las actividades que mayor número de intentos y abandonos produce ya que una cosa es plantearse desarrollar un hábito y otra diferente conseguirlo.
Muchos de éstos fracasos provienen de procesos cognitivos equivocados. Planteamos creencias o expectativas poco acordes a la realidad lo que conduce directamente a la frustración. Estos son algunos ejemplos:
- Una auto exigencia excesivamente perfeccionista:
• Nos planteamos desde el comienzo ir tres veces por semana como mínimo.
• Pensamos que comenzar poco a poco no sirve de nada.
- Nos inscribimos en un gimnasio muy vistoso pero que se encuentra alejado.
- Nuestro gimnasio ofrece numerosas posibilidades dentro de la cuota pero no disponemos de tiempo real para disfrutarlo.
- Intentamos establecer el hábito de ir al gimnasio pagando un año por adelantado dando por supuesto que como hemos pagado ... y al final no vamos y hemos invertido una importante cantidad de dinero.
Todas estas actitudes, cuando nos llevan al fracaso, generan frustración y culpa, dos emociones negativas que no nos llevan a la acción sino a todo lo contrario, a no hacer nada y además sentirnos mal por ello.
Para establecer un buen hábito, especialmente al principio, hay que establecer pequeñas metas. Es mejor reforzarnos con la satisfacción de haber completado estos logros que castigarnos por no haber cumplido.
A continuación, enumeramos una serie de recomendaciones destinadas a corregir algunos de los errores mencionados y pensar de forma más realista, comenzar poco a poco, valorar el esfuerzo y premiarse por pequeños logros, desarrollar capacidad de autocontrol. Todo ello con el fin de mantener con el tiempo la práctica regular de ejercicio, de cualquier tipo de ejercicio:
1. Para que la práctica de ejercicio físico sea saludable y continúe en el tiempo, tiene que ser agradable y no vivirlo como una obligación o sacrificio.
2. Plantéate objetivos realistas y alcanzables. Mejor ponerse como objetivo ir dos días a la semana y no todos los días a las 7 de la mañana.
3. No hay que dejarse llevar por el entusiasmo del principio.
4. Adopta una actitud relajada y no emocional. Es imprescindible para desarrollar el hábito y no perder la motivación.
5. Las primeras semanas son las más importantes. De la actitud que se tome durante éste tiempo depende que se abandone o se continúe. No hay que sentirse ridículo o débil por ir poco a poco.
6. Sé asertivo, mantente en una posición neutral con respecto a ti mismo y a los demás.
7. Cuanto más despacio se vaya, más fácil será desarrollar el hábito.
8. NO practiques ejercicio únicamente para PERDER PESO y quemar calorías. La mejor manera de mantenerse es llevar una vida saludable. Haz ejercicio para sentirte bien, mejorar tu salud y tu calidad de vida. La pérdida de peso será una consecuencia.
9. Haz ejercicios a los que te puedas adaptar fácilmente y realiza cada uno de ellos de forma adecuada prestando atención a la postura que debes mantener para no lesionarte.
10. Es importante combinar ejercicios de tipo anaeróbico (ejercicios breves, basados en la fuerza) con ejercicios aeróbicos (basados en la respiración).
Hay que practicar ejercicio de forma adecuada, con regularidad y moderación.