17/05/2017
La importancia de identificar y expresar las emociones
1. “Siento que soy insignificante para mis superiores”
La palabra “insignificante” describe cómo creo que los demás me evalúan más que un verdadero sentimiento, que en esta situación podría ser: “Me siento triste” o “Me siento desalentado”.
2. “Me siento incomprendido”.
Aquí la palabra “incomprendido” indica la valoración que hago del nivel de comprensión de la otra persona en lugar de expresar un sentimiento real. En esta situación sería mejor decir que me siento ansioso o molesto o presa de cualquier otra emoción.
3. “Me siento ignorado”
Una vez más, esta actitud es más bien una interpretación del proceder de los demás que una declaración expresa de cómo me siento. Sn duda ha habido ocasiones en que nos hemos creído ignorados y hemos sentido alivio porque aspirábamos a que nos dejasen en paz. Ha habido otras ocasiones, sin embargo, en que nos hemos sentido ofendidos al creernos ignorados porque lo que queríamos es que nos prestasen atención.
Hay palabras, como “ignorado”, que expresan cómo interpretamos a los demás más que cómo nos sentimos. Otras palabras de este estilo son: abandonado, degradado, excluido, incomprendido, manipulado, presionado, rechazado, etc.
Cuando expresamos nuestros sentimientos usamos palabras que hacen referencia a emociones específicas en lugar de utilizar palabras vagas o de sentido general. Si decimos, por ejemplo: “Me encuentro bien” este “sentirse bien” puede significar que nos sentimos “felices”, “entusiasmados”, “aliviados”, etc. Palabras como “bien” y “mal” impiden que la persona que nos escucha entiendan claramente qué sentimos en realidad.
Cuando decimos que nos sentimos bien, es probable que nos sintamos agradecidos, alegres, competentes, confiados, comprometidos, enérgicos, esperanzados, equilibrados, felices, fuertes, ilusionados, motivados, optimistas, orgullosos, reconfortados, satisfechos, seguros, serenos.
Cuando no tenemos satisfechas nuestras necesidades podemos sentirnos abatidos, agobiados, desanimados, desengañados, dolidos, enojados, frustrados, heridos, indignados, infelices, inseguros, malhumorados, melancólicos, nerviosos, preocupados, rencorosos, temerosos, tristes.
Si elaboramos un vocabulario de sentimientos nos permitirá describir de forma clara y precisa nuestras emociones lo que facilitará nuestra comunicación. La correcta expresión de nuestros sentimientos nos ayudará a resolver conflictos con nosotros mismos y con los demás, distinguiendo los sentimientos reales de las afirmaciones que describen ideas y hacen valoraciones o interpretaciones de la realidad.