19/11/2025
Desde el fallecimiento de mi padre, he aprendido algunas cosas que me gustaría compartir; siendo, además, psicóloga de emergencias, lo que me da un punto de vista posiblemente diferente.
Son aprendizajes propios que comparto por si a alguien le pueden resonar.
1-Transmitir, en vida, a tu ser querido, que le quieres y todo lo que necesites decirle.
Como psicóloga de emergencias, he acompañado a muchas personas en duelo;y ahí aprendí que hoy estamos y mañana no lo sabemos. Que solo tenemos el hoy para cuidar la relación con quienes queremos.
Vivirlo en primera persona es distinto.
Cuando mi padre falleció, en el tanatorio nos preguntaron si queríamos verle una vez más antes de llevarlo al cementerio. Reflexioné, y me di cuenta de que no necesitaba despedirme.
Tenía toda una vida que recordar.
Y últimamente fueron meses y años de cuidar, llamar, abrazar.
No necesitaba despedirme.
Me sentí, y me siento, en paz.
Desde que empecé en la emergencia, creo que la vida de alguien importa mucho más que su fallecimiento. Que lo importante es recordar lo vivido con las personas… al fin y al cabo, todos nos iremos algún día. Y lo que perdurará no es cómo nos fuimos. Es cómo hemos vivido.
Él sigue aquí, en la música, en las risas y en las anécdotas.
Y eso es lo que recuerdo, también, de mi padre ❤️