21/01/2023
📌Contrariamente a la creencia popular, la depresión es un trastorno frecuente en personas mayores, estando presente en el 5,7% de la población mayor de 60 años y aumentando esta cifra conforme se avanza la edad. Dentro de este grupo, las personas mayores que viven en entornos residenciales tienen un riesgo aún mayor de depresión, con cifras que se acercan al 50% de las personas mayores.
Respecto a la manifestación de la depresión en personas mayores, existen ciertas peculiaridades con respecto a los adultos jóvenes. Así lo explica un reciente artículo publicado en la revista Neuropsychiatric Disease and Treatment, en el que se realiza una revisión de la depresión en personas mayores y se ofrecen recomendaciones prácticas para los profesionales sanitarios que trabajan en este sector.
Concretamente, se debe tener en cuenta que, por ejemplo, ✅los sentimientos de disforia o tristeza (que constituyen síntomas centrales para el diagnóstico de depresión según el DSM-5) suelen estar ausentes en los adultos mayores. En población mayor se observa una variante de la depresión, reconocida en la literatura como "depresión sin tristeza", que se caracterizada por falta de interés, dificultades para dormir, falta de esperanza, pérdida de apetito y pensamientos de muerte. Por el contrario, ✅otros síntomas como la falta de vigor y el retraimiento o la pérdida de interés están más pronunciados en adultos mayores que en personas más jóvenes, así como los niveles de ansiedad elevados en la mañana y los pensamientos sobre el suicidio también son más frecuentes en el grupo de edad avanzada.
Los autores de la revisión señalan la importancia de tener en cuenta 👉 el conjunto de síntomas somáticos relacionados con la depresión al establecer este diagnóstico en personas mayores, puesto que es más probable que las personas mayores expresen su depresión en términos de quejas somáticas. Estos síntomas, que están especialmente presentes en la personas mayores con depresión en comparación con los adultos jóvenes con depresión, incluyen: ✅la pérdida de apetito y peso (frente al aumento de peso o de apetito en adultos jóvenes), ✅la disminución de las horas de sueño (frente a la hipersomnia más frecuente en adultos jóvenes), ✅el cansancio físico (frente a la fatiga mental más frecuente en adultos jóvenes), ✅la presencia de déficits cognitivos amplios (y no sólo la falta de concentración presente en adultos jóvenes), ✅la presencia de un amplio conjunto de síntomas somáticos vagos y, sobre todo, asociados al aparato gastrointestinal (no presentes en adultos jóvenes) y ✅os síntomas de agitación (frente al retraso psicomotor más asociado a adultos jóvenes con depresión). En este sentido, aunque los síntomas somáticos son muy característicos de la depresión en personas mayores, los autores advierten que se debe tener especial precaución de no confundir estos síntomas con los síntomas asociados al envejecimiento normal, así como evaluar la presencia de enfermedades médicas comórbidas que puedan explicar estas manifestaciones.
Más información aquí: https://www.infocop.es/view_article.asp?id=22700&cat=47