19/12/2025
Compararte puede parecer inofensivo…
pero muchas veces es justo lo que te hace sentir que nunca es suficiente.
Cuando miras el camino de otras personas, pierdes de vista el tuyo.
Tu contexto, tu cuerpo, tu historia, tu momento vital.
Y entonces el progreso deja de sentirse como avance y empieza a vivirse como fracaso.
Observarte es diferente.
Es darte cuenta de lo que hoy haces mejor que antes.
De lo que ya no duele igual.
De lo que estás sosteniendo, aunque nadie lo vea.
El cambio real no nace de competir,
nace de escucharte y ajustar desde ahí.
✨ Si esto te resuena, el vídeo te va a ayudar a mirarte con otros ojos.