04/11/2025
La bursitis es la inflamación de una bursa, una pequeña bolsa llena de líquido sinovial que se encuentra en zonas donde los tejidos se rozan entre sí (como entre un tendón y un hueso).
Su función es reducir la fricción y permitir el movimiento fluido de las articulaciones. Cuando se irrita o inflama, puede causar dolor localizado, rigidez y, en ocasiones, calor o enrojecimiento.
🔹 Causas más comunes
Movimientos repetitivos o sobrecarga articular
Golpes o presión mantenida sobre una articulación
Infecciones o enfermedades inflamatorias (como artritis reumatoide o gota)
🔹 Tipos más frecuentes de bursitis
Bursitis subacromial (hombro): provoca dolor al levantar el brazo o dormir de lado.
Bursitis olecraniana (codo): se manifiesta como una hinchazón visible en la parte posterior del codo.
Bursitis trocantérica (cadera): produce dolor lateral que puede irradiar hacia el muslo.
Bursitis prepatelar o anserina (rodilla): común en quienes se arrodillan o corren frecuentemente.
Bursitis retrocalcánea (talón): aparece por fricción con el calzado o sobreuso del tendón de Aquiles.
🔹 Tratamiento y prevención
En la mayoría de los casos, el tratamiento es conservador, basado en:
Reposo relativo y modificación de actividades
Aplicación de frío local
Fisioterapia y ejercicios de fortalecimiento
Antiinflamatorios prescritos por el médico
En casos más persistentes, puede valorarse la infiltración local o, en muy pocas ocasiones, un tratamiento quirúrgico.
👉 Si experimentas dolor localizado y persistente en alguna articulación, es recomendable una valoración médica para determinar la causa y personalizar el tratamiento.