22/10/2025
✋ Antes de aprender a escribir, un niño necesita usar sus manos.
Mucho antes de tomar un lápiz, el cerebro necesita construir las bases motrices y sensoriales que harán posible ese gesto tan complejo que es la escritura.
🧠 Actividades como amasar, rasgar, abotonar, trasvasar o enhebrar desarrollan la motricidad fina, la coordinación ojo–mano y la fuerza en los dedos. Todo eso prepara las conexiones neuronales que más adelante permitirán sostener el lápiz, controlar la presión y moverlo con precisión.
📚 Escribir no empieza en el papel, sino en el juego, la exploración y la experiencia corporal.
Cada vez que un niño manipula, construye o experimenta, está “escribiendo” en su cerebro los cimientos del aprendizaje.