08/11/2025
Mis pulmones respiran, pero el aire pesa.
En la medicina tradicional china, la tristeza habita en los pulmones:
allí donde el aliento se vuelve suspiro,
donde el alma se hace niebla.
Cuando mi madre partió, algo en mi corazón se quebró.
El Shen, el espíritu que da luz al corazón,
se dispersó buscando su sombra en el cielo.
Desde entonces, respiro distinto.
En la antigua China se creía que cada ser tenía dos almas:
el Hun, que asciende al cielo,
y el Po, que permanece junto a la tierra.
Quizás su Hun ahora vuela entre las nubes
y su Po reposa en los ecos que dejó en mí.
Esta imagen es la forma que toma mi tristeza:
gris, silenciosa, transparente.
No se ve, pero vive dentro.
🌫️ La ausencia no se cura, se transforma.
En la medicina del alma, se honra lo que ya no está,
se agradece lo que aún vibra en lo invisible.
Porque el amor no muere, solo cambia de lugar.
Y su alma, quizás, respira conmigo.