22/05/2012
Saludos, cinéfilos. Esta noche concluiremos el ciclo dedicado al cineasta neoyorquino John Frankenheimer, hemos recorrido a lo largo de tres meses y trece títulos, los trabajos más señalados de su autor, deteniéndonos más ampliamente en sus cintas de las décadas de los 60 y los 70.
Ya dijimos en diversas ocasiones que se trataba no solo de un homenaje más sino que considerábamos más que necesario devolverle la calidad y dignidad perdidas u olvidadas por la mayor parte del público. Cierto es que su obra completa da muestras de cierta irregularidad, sobre todo en lo que respecta a la década de los 80, aunque, una vez más, hemos de decir que tanto las circunstancias personales de Frankenheimer como su menguada capacidad de seducción hacia grandes proyectos sumadas a la merma notable de la confianza de las productoras en un autor que encadenaba fracaso tras fracaso en taquilla -salvo algunas obras ya reseñadas aquí-, se deberían contemplarse como las sombras que recorren razonablemente una trayectoria, aunque no impecable, sí enteramente digna del mayor respeto y admiración por un talento artesanal al servicio del discurso cinematográfico.
Así pues, clausuramos aquí la séptima temporada del cine fórum de la Morrissey, 'La máquina de déjà vu' y, lamentablemente, la definitiva, con un título más de su filmografía que sí fue valorado por parte de la crítica que supo apreciar los méritos de la misma, a pesar de no tratarse de una obra maestra como las anteriormente visitadas. Me refiero a 'Ronin', producción norteamericana de 1998, rodada en escenarios naturales, en Francia, con un elenco artístico sobresaliente y un guión sólido realizado por otro gran nombre del mundo del cine, David Mamet, quien en esta ocasión, por disensiones con la productora, resolvió firmar su colaboración con seudónimo.
Se trata de un intenso thriller de acción, del género entre el film noir europeo y el policíaco norteamericano de los 70; en cualquier caso, un trabajo de factura técnica espectacular, sin presencia abusiva de efectos especiales, sobre todo en las secuencias de las persecuciones en automóviles por espacios urbanos a velocidades de vértigo, excelentemente planificados y montados bajo las órdenes de alguien que ya había dado muestras sobradas de pericia técnica, cuando allá por los 60 sorprendió a todo el mundo al rodar también en Europa la superproducción de carreras automovilísticas 'Grand Prix'; es de suponer que la fascinación de Frankenheimer por el deporte del motor y los coches de carreras le facilitó la inspiración no sólo para hacer sus pinitos como amateur sino para emplazar las cámaras de forma completamente novedosa hasta la fecha.
'Ronin' presenta una temática en torno al valor de la lealtad y su transgresión por medio de la traición; a este propósito el nombre de la misma proviene de la cultura japonesa, en la cual se designa así a aquellos guerreros que han perdido el honor por no haber sabido defender a sus amos, con lo cual sólo les queda vagar errabundos dedicándose a la mendicidad o alquilándose como mercenarios. Una vez perdido, el honor es ya irrecuperable, además de que semejante lacra forma parte de la herencia familiar. Bajo estas premisas se construye análogamente el grupo de personajes principales, ex agentes especiales de distintas nacionalidades, veteranos y desengañados por los acontecimientos vividos en el pasado durante la Guerra Fría, que son reclamados para realizar una peligrosa tarea, en la que tendrán que volver a poner a prueba lo que mejor saben hacer. Sin embargo, simplemente diremos que se tuercen un poco las cosas...
Este es, más o menos, el planteamiento inicial de esta historia que por lo demás ofrece todas las garantías para pasar un buen rato de entretenimiento y suspense. Creo que es un buen trabajo para terminar la temporada y el ciclo. Os espero para disfrutarlo en vuestra compañía.
En cualquier caso, también quiero recordaros que el broche de oro del cine fórum lo pondremos la semana que viene, con la proyección de una película de la cual no pienso deciros nada para conseguir asegurame una cierta sorpresa para aquellos que queráis acompañarnos el último día.
Salud y buen cine.