10/09/2020
El reflejo de succión está presente desde la etapa fetal, se han visto por ultrasonido a bebés chupándose el dedo.
Este reflejo temprano de succión natural explica que un bebé se chupe el dedo a veces desde muy pequeño, pero, cuando el reflejo se convierte en hábito y esté es intenso y prolongado, habrá consecuencias.
Puede afectar su habla, al modificar estructuras que contribuyen en la articulación de voces, se ha dicho que facilitaría problemas de oído.