18/09/2022
UN POCO DE HAMBRE, UN POCO DE FRÍO, UN POCO DE TENSIÓN
Así como se tensa la cuerda de una guitarra, un poquito de hambre, un poquito de frío, un poquito de tensión son necesarios para vibrar la vida, para tener salud y para crecer a nivel espiritual.
Nos hacen creer que el confort y tenerlo todo es la clave de la felicidad, cuando en realidad resalta los aspectos más bajo del ser. La pereza, la codicia, el materialismo por ejemplo.
La adversidad de lo contrario eleva el ser. Despierta su espíritu creativo, su tenacidad, nos expande y nos vuelve seres espirituales.
Siempre guardar un poco de tensión a todos niveles de forma consciente, reforzará el ser y su salud integral.
Un poco de hambre: el ayuno de 16 horas mínimo al día es un método reconocido para conseguir salud y prolongar la vida. Uno se siente tónico, energético, más lúcido el vientre vacío.
Las tiroides adormidas termostato de nuestro cuerpo, no se van a despertar, los metabolismos no se van a relanzar si estamos cubiertos sin nunca exponernos a un poco de frescor.
Sin un mínimo de actividad física, el cuerpo se ablanda, el corazón se debilita, la capacidad pulmonar disminuye, la circulación de la sangre y la eliminación de los desechos se ralentizan.
Nuestros antepasados cuando no había tanto carros, tiendas y vida sedentaria, caminaban, cultivaban la tierra, subían montañas, cargaban pesos, se exponían a los elementos y esto era unos factores importantes en su calidad de salud.
Ellos trabajaban con esta vital noción de supervivencia.
Nunca me sentí tan viva que cuando fui expuesta a situaciones difíciles y que me superé. Mis mejores recuerdos son cuando vivía sin dinero, recolectando hojas de quelite para poder sobrevivir o que vivía de lugar en lugar en una tienda de campaña.
Quiten el instinto de buscar alimentos y de supervivencia a un animal o una persona, su vida perderá sentido, dejará de sentirse vivo y conectado al gran todo como debería ser.
El confort es un trampa. Las tiendas con todas estas comidas accesibles las 24 horas son unas trampas.
Hemos perdido esta tensión tan necesaria para sentirnos vivos.
Pero es en nuestro poder de tensar las cuerdas, de volver a un modo de vida más sencillo. No hay carro? Caminamos, reforzamos nuestra musculatura, bombeamos aire alegremente. No hay mucha comida? Hay que estar expuesto a situaciones extrema a veces para darse cuenta de lo poco que necesitamos para comer.
No temas, la seguridad material es una ilusión.
Todo esta supervisado por una fuerza superior, un orden, una justicia divina, lo llamamos Dios, el Universo, la vida, el karma.
Confía, ten fe, ocúpate de vibrar bonito y aceptar la tensión que requiere abrirse a lo desconocido.