05/12/2025
La vida a veces nos quiebra un poco, pero no para dejarnos rotos, sino para permitir que una parte de nosotros se ilumine desde dentro. Esa rendija que duele también es una puerta: por ahí entra claridad, entra calma y entra la versión de ti que está aprendiendo a sostenerse con más ternura. No temas tus grietas; son el puente entre lo que fuiste y lo que estás creciendo a ser. ✨