05/09/2025
Es un mito que si alguien fuma “lejos” del niño el tabaco no le hace daño. Aunque no lo hagan directamente frente al niño, el humo del tabaco sigue siendo muy dañino por varias razones:
🚭Humo de segunda mano (pasivo): si el niño está en el mismo ambiente donde se fuma (aunque sea en otra parte de la casa, o más tarde), sigue inhalando partículas tóxicas que permanecen suspendidas en el aire durante horas.
🚭Humo de tercera mano: las sustancias del tabaco se adhieren a la ropa, el pelo, la piel, los muebles, las paredes, el coche, etc. Luego se liberan de nuevo al aire o entran en contacto directo con el niño, que puede absorberlas al respirar, tocar o incluso llevarse las manos a la boca.
🚭Mayor vulnerabilidad: los bebés y niños pequeños respiran más rápido, tienen pulmones en desarrollo y sistemas inmunológicos más frágiles, por lo que el impacto de estas toxinas es más fuerte. Está demostrado que aumenta el riesgo de asma, bronquitis, infecciones de oído, muerte súbita del lactante, entre otros problemas.
🔴En resumen: fumar “lejos” no elimina el riesgo. La única forma de proteger completamente a un niño es que nadie en contacto directo fume en absolutamente ningún lugar, así como tratar de evitar exponerlo a casas, autos, ropa u otros objetos y lugares impregnados de humo.
No sirve el "me salgo a fumar", "solo fumo en el trabajo" etc.
Cuidemos a nuestros niños, son nuestro bien más valioso.